¿Cuándo es perfecta una ventana? ¿Cuándo se adapta al estilo arquitectónico del edificio? ¿Cuándo es duradera y especialmente segura? ¿Cuándo ofrece el mejor aislamiento? ¿Cuándo se puede utilizar de manera intuitiva? ¿Cuándo...? Para nosotros solo hay una respuesta: Una ventana es realmente perfecta cuando responde a los máximos requisitos estéticos y funcionales. Sin excepciones ni concesiones.
En 1969 se erigió en la Marsstrasse de Múnich, por encargo de la fabrica de cerveza Spaten, un edificio administrativo de seis plantas, a las que más tarde se añadirían dos más.
Tras un gran incendio en los años ’60 en La Chaux-de-Fonds (Suiza) se sustituyó un conocido cabaret de la ciudad de principios del siglo XX por un complejo residencial y comercial que respira el espíritu del estilo arquitectónico brutalista.