En 1969 se erigió en la Marsstrasse de Múnich, por encargo de la fabrica de cerveza Spaten, un edificio administrativo de seis plantas, a las que más tarde se añadirían dos más.
Eficiente, ecológico y a medida.
Construir casas sostenibles energéticamente eficientes es uno de los grandes desafíos de la transformación energética.
Mobble es un concepto que mira hacia el futuro: casas ecológicas de madera a base de componentes modulares, nacidas de una colaboración entre la empresa belga del mismo nombre y la Universidad de Gante. Prefabricadas en su taller propio, las innovadoras unidades de vivienda se pueden colocar en terrenos vacíos o en huecos entre casas.
El Mobble se eleva hasta diez metros sobre el suelo antes de que la grúa lo coloque en uno de los estrechos espacios vacíos típicos de las casas belgas en hilera. Así fue en un proyecto en Amberes, donde se colocó la primera planta y luego la segunda. El montaje dura solo unas pocas horas, el edificio está listo ese mismo día. Una gran ventaja, ya que así el tiempo meteorológico no influye ni en la entrega ni en el último paso de la construcción: el montaje. Las pequeñas casas se fabrican con la máxima eficiencia, ya que todo el proceso de producción tiene lugar en el taller propio de la empresa en Eeklo. El baño, la cocina, las ventanas, los azulejos, los suelos e incluso las tuberías se montan previamente; normalmente solo falta colocar la escalera. Los materiales utilizados son sostenibles y ecológicos. La base es siempre la madera; para el aislamiento se usa celulosa, entre otras cosas. Los materiales se pueden desmontar, separar y reutilizar. Tecnologías modernas, como bombas de calor y colectores solares, garantizan un consumo de energía sostenible y un ambiente agradable. Tras solo cuatro meses de planificación y producción, la casa está lista para su traslado a la obra.
El Mobble se eleva hasta diez metros sobre el suelo antes de que la grúa lo coloque en uno de los estrechos espacios vacíos típicos de las casas belgas en hilera. Así fue en un proyecto en Amberes, donde se colocó la primera planta y luego la segunda. El montaje dura solo unas pocas horas, el edificio está listo ese mismo día. Una gran ventaja, ya que así el tiempo meteorológico no influye ni en la entrega ni en el último paso de la construcción: el montaje. Las pequeñas casas se fabrican con la máxima eficiencia, ya que todo el proceso de producción tiene lugar en el taller propio de la empresa en Eeklo. El baño, la cocina, las ventanas, los azulejos, los suelos e incluso las tuberías se montan previamente; normalmente solo falta colocar la escalera. Los materiales utilizados son sostenibles y ecológicos. La base es siempre la madera; para el aislamiento se usa celulosa, entre otras cosas. Los materiales se pueden desmontar, separar y reutilizar. Tecnologías modernas, como bombas de calor y colectores solares, garantizan un consumo de energía sostenible y un ambiente agradable. Tras solo cuatro meses de planificación y producción, la casa está lista para su traslado a la obra.
Por las alturas: el módulo Mobble premontado se entrega con un remolque y se coloca sobre el cimiento ya preparado mediante una grúa.
Según el terreno y la orientación, la correspondiente vivienda se adapta a las necesidades del cliente. La planificación y construcción modular permiten a Mobble reaccionar a las cambiantes situaciones vitales. ¿Que ha aumentado la familia o hace falta una segunda oficina para teletrabajar? No hay problema, se pueden añadir más habitaciones o unidades de vivienda completas. ¿Que los hijos se van de casa? Se puede retirar un módulo de la casa y utilizarlo en otro lugar. El sistema de construcción modular hace que los cambios se puedan planificar y llevar a cabo en pocas semanas. Finstral, al igual que Mobble, también piensa de manera modular, así que no sorprende que los belgas hayan elegido colaborar con la empresa familiar surtirolesa. Y como Finstral se encarga de todo, desde el desarrollo y la extrusión de los perfiles hasta la fabricación del vidrio aislante o el lacado en polvo del aluminio, el fabricante de ventanas puede ofrecer sistemas en los que prácticamente todo puede combinarse entre sí. El material para los marcos de la parte exterior del Mobble es el aluminio, disponible en unos 250 colores distintos; en el interior se utiliza PVC fácil de limpiar y disponible en siete colores. Ambos materiales se ofrecen además con diferentes acabados imitación madera.
El módulo por las alturas: algo cotidiano en Mobble.
Aluminio en el exterior, PVC en el interior: los marcos estrechos de Finstral son resistentes, robustos y están disponibles en muchos colores.
El resultado de un método de trabajo modular es una casa de madera perfectamente adaptada al entorno y que se puede personalizar en cualquier momento.
Tanto Mobble como Finstral establecen con sus conceptos modulares referentes para un futuro eficiente en el sector de la construcción.
Más estrechos imposible: los módulos construidos como marcos de madera caben en cualquier hueco.
A Mobble le convenció no solo la modularidad de la gama de productos de Finstral, sino también su enfoque ecológico y sostenible, desde el uso de electricidad 100 % ecológica en sus 14 plantas hasta la idea de una producción sin residuos, en la que los recortes, virutas y restos de material se recogen, procesan y, en la medida de lo posible, se vuelven a reutilizar. El planteamiento de Finstral respecto a la estructura de sus elementos también va en consonancia con la filosofía de Mobble. Ambas empresas aspiran a que sus productos funcionen óptimamente, convenzan estéticamente, duren mucho y sus materiales se puedan separar tras el periodo de uso, estableciendo así referentes para un futuro eficiente en el sector de la construcción.
Ficha técnica del proyecto:
Proyecto: Módulos prefabricados
Encargo: Montaje de ventanas
Arquitectos: Según proyecto
Año de construcción: Desde 2021
Superficie total: 100-120 m² (según proyecto)
Lugar: Bélgica
Elementos Finstral:
Ficha técnica del proyecto:
Proyecto: Módulos prefabricados
Encargo: Montaje de ventanas
Arquitectos: Según proyecto
Año de construcción: Desde 2021
Superficie total: 100-120 m² (según proyecto)
Lugar: Bélgica
Elementos Finstral:
- Ventana FIN-Window Classic-line 77+8 aluminio-PVC
- Puerta corredera elevadora FIN-Slide Step-line 144 aluminio-PVC
- Puerta de entrada FIN-Door Step Frame - Step Frame PVC-PVC
¡Eco-lógico! Todos los materiales utilizados en la fachada, las ventanas y la puerta de entrada cumplen criterios de sostenibilidad.
El módulo se coloca el mismo día.
Todo el proceso de producción tiene lugar en el taller propio de Mobble.
Los materiales destacan por su óptima funcionalidad, su estética convincente y su gran durabilidad.
Conexión a obra
Para que la construcción en serie no implique uniformidad hacen falta soluciones modulares con conexiones unificadas que permitan variaciones. Justo esta es la fortaleza de la gama de ventanas Finstral de la que se sirven los edificios de Mobble. La conexión a obra de las ventanas en las paredes fabricadas industrialmente con soportes de madera es siempre la misma, mientras que la ejecución de los elementos varía con cada encargo: en el caso del material, de PVC o PVC-aluminio hasta aluminiomadera, o en de la funcionalidad, desde ventanas a puertas de entrada u hojas de ventana con sistemas de oscurecimiento integrado. Esta riqueza de variantes no influye nunca en el montaje profesional de las ventanas, puesto que la conexión a obra es siempre idéntica.
Para que la construcción en serie no implique uniformidad hacen falta soluciones modulares con conexiones unificadas que permitan variaciones. Justo esta es la fortaleza de la gama de ventanas Finstral de la que se sirven los edificios de Mobble. La conexión a obra de las ventanas en las paredes fabricadas industrialmente con soportes de madera es siempre la misma, mientras que la ejecución de los elementos varía con cada encargo: en el caso del material, de PVC o PVC-aluminio hasta aluminiomadera, o en de la funcionalidad, desde ventanas a puertas de entrada u hojas de ventana con sistemas de oscurecimiento integrado. Esta riqueza de variantes no influye nunca en el montaje profesional de las ventanas, puesto que la conexión a obra es siempre idéntica.
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