Renovación de ventanas en un edificio de oficinas de la compañía de seguros Generali de Turín.
La nueva “E”.
De una hacienda abandonada a un moderno complejo de edificios, con ventanas de Finstral.
Solo se conserva la planta en forma de E. Para la reconstrucción de la “Corte Scolastica” en Burago di Molgora, cerca de Monza, Finstral combina funcionalidad y estética en una composición personalizada sin concesiones.
Es una soleada mañana de octubre. Florian Oberrauch, miembro de la directiva de Finstral, Simone Gattabuia, jefe de proyectos de Finstral, y el arquitecto Riccardo Dossi se han reunido en Burago di Molgora, cerca de Monza, para examinar juntos el resultado del proyecto conjunto. El moderno complejo de edificios llamado “Corte Scolastica” ya es habitable y la luz otoñal se refleja en las ventanas. El nombre se ha elegido en honor a Maria Scolastica Porcari, la madre de Nicola Riccardi, propietario de “Riccardi Group”, que ha encargado la obra de construcción.
“Es realmente increíble lo que hemos creado juntos en este lugar”, considera Riccardo Dossi. “Es casi impensable cómo estaba esto antes. La antigua finca estaba completamente abandonada... una renovación total o parcial era implanteable. El nuevo diseño solo tenía que conservar la planta con forma de letra `E´”. Y, ahora, los cinco módulos del complejo están terminados y forman en su conjunto la nueva “E”. Esta alberga 35 viviendas en propiedad, así como numerosos comercios en los bajos, todos ellos modernos y pensados en detalle.
Inteligente, eficiente y bonito
Las unidades comerciales disponen de un sistema de hogar inteligente con una opción de control de ventanas avanzada y todos los espacios cuentan con un sistema de calefacción y climatización altamente eficiente. “Las exigencias eran realmente elevadas”, destaca Dossi. “Por consecuencia, las ventanas también tenían que ofrecer lo suyo”. En el aspecto funcional se requería sobre todo una elevada protección antirrobo y el mejor aislamiento térmico y acústico. En lo referente a la estética, el cliente y el arquitecto quería perfiles estrechos y grandes superficies acristaladas, para dejar entrar en el interior la mayor cantidad de luz posible y aportar al edificio liviandad de cara al exterior.
“Con estos requisitos sugerí a Finstral como socio”, cuenta el arquitecto: “Al fin y al cabo, ya había tenido experiencias positivas con Finstral, tanto con sus productos como con la calidad del montaje. Para el cliente era importante colaborar con una marca consolidada y con experiencia. Así que al final nos resultó fácil tomar la decisión”.
Es una soleada mañana de octubre. Florian Oberrauch, miembro de la directiva de Finstral, Simone Gattabuia, jefe de proyectos de Finstral, y el arquitecto Riccardo Dossi se han reunido en Burago di Molgora, cerca de Monza, para examinar juntos el resultado del proyecto conjunto. El moderno complejo de edificios llamado “Corte Scolastica” ya es habitable y la luz otoñal se refleja en las ventanas. El nombre se ha elegido en honor a Maria Scolastica Porcari, la madre de Nicola Riccardi, propietario de “Riccardi Group”, que ha encargado la obra de construcción.
“Es realmente increíble lo que hemos creado juntos en este lugar”, considera Riccardo Dossi. “Es casi impensable cómo estaba esto antes. La antigua finca estaba completamente abandonada... una renovación total o parcial era implanteable. El nuevo diseño solo tenía que conservar la planta con forma de letra `E´”. Y, ahora, los cinco módulos del complejo están terminados y forman en su conjunto la nueva “E”. Esta alberga 35 viviendas en propiedad, así como numerosos comercios en los bajos, todos ellos modernos y pensados en detalle.
Inteligente, eficiente y bonito
Las unidades comerciales disponen de un sistema de hogar inteligente con una opción de control de ventanas avanzada y todos los espacios cuentan con un sistema de calefacción y climatización altamente eficiente. “Las exigencias eran realmente elevadas”, destaca Dossi. “Por consecuencia, las ventanas también tenían que ofrecer lo suyo”. En el aspecto funcional se requería sobre todo una elevada protección antirrobo y el mejor aislamiento térmico y acústico. En lo referente a la estética, el cliente y el arquitecto quería perfiles estrechos y grandes superficies acristaladas, para dejar entrar en el interior la mayor cantidad de luz posible y aportar al edificio liviandad de cara al exterior.
“Con estos requisitos sugerí a Finstral como socio”, cuenta el arquitecto: “Al fin y al cabo, ya había tenido experiencias positivas con Finstral, tanto con sus productos como con la calidad del montaje. Para el cliente era importante colaborar con una marca consolidada y con experiencia. Así que al final nos resultó fácil tomar la decisión”.
La “Corte Scolastica” en Burago di Molgora, cerca de Monza.
Funcionalidad y estética
“En Finstral hay dos cosas que siempre van de la mano: la funcionalidad y la estética. Y hemos desarrollando nuestra gama de productos de forma consecuente bajo el principio de la modularidad. Es decir que casi todo combina con todo”, explica Florian Oberrauch. “Por eso, para este proyecto también pudimos suministrar exactamente los productos y las combinaciones de productos que se necesitaban”. En este caso se utilizaron ventanas y puertas balconeras con la forma de marco Nova-line. Sus características especiales son perfiles extremadamente estrechos y un aspecto todo vidrio recubriendo el marco. Como complemento, el angular diseño del marco Step-line aporta a las puertas balconeras una apariencia escalonada y a la vez delgada. Por último, las grandes superficies de vidrio de los llamativos frontales acristalados dejan entrar toda la luz posible, un efecto que en el caso de los comercios invita a entrar. Algunos de los elementos inferiores son de vidrio y otros tienen un panel liso, que se adapta al color del perfil, oscuro en el exterior y claro en el interior.
Materiales de las superficies de los marcos
Las superficies de los marcos de las ventanas y puertas balconeras y correderas son de aluminio oscuro por el exterior y de PVC claro en el interior. “No suena muy espectacular”, reconoce el arquitecto Dossi. “Pero fue una decisión muy consciente y la acertada”. Estéticamente, los perfiles de aluminio oscuro en el lado exterior aportan a las edificaciones un aspecto moderno y elegante, mientras que las superficies de PVC blanco llenan de claridad los espacios interiores. Funcionalmente, el aluminio en el exterior permanece resistente a las inclemencias, es muy robusto y además no se deforma con el calor, mientras que los perfiles de PVC en el interior son fáciles de limpiar y duraderos, aparte de ser agradables al tacto. En definitiva, las ventanas contribuyen de forma decisiva a que las cinco edificaciones de la “Corte Scolastica” resulten muy elegantes y muy abiertas.
Protección completa
“A quien no está abierto el complejo es a visitantes indeseados”, dice Simone Gattabuia, que ha dirigido el proyecto por parte de Finstral. “Por eso las ventanas utilizadas protegen contra insectos, así como contra ladrones. Además de contra un exceso de sol y de ruido”.
Las ventanas cuentan por ello con mosquiteras enrollables verticalmente y las puertas balconeras y correderas, con mosquiteras en “plissee” deslizantes lateralmente. Y por ello se utilizó el doble vidrio aislante con protección solar Mediterran 2 que, con un valor g de 0,45 y un valor LT de 0,73, deja pasar mucha luz a los espacios, pero impide que se sobrecalienten. Y por ello se usaron además dos tipos de vidrio de seguridad: el vidrio de seguridad simple templado y el vidrio laminado de seguridad Multiprotect, que está compuesto por dos vidrios adheridos entre sí mediante una lámina muy resistente al desgarro. Ambas variantes reducen el riesgo de lesiones. Si el vidrio se rompe, el Bodysafe solo se fractura en muchos fragmentos pequeños y romos, en vez de afilados. En el caso de Multiprotect, los fragmentos incluso se quedan pegados a la lámina. En caso de un intento de robo rompiendo el vidrio con un martillo, el vidrio se fragmentaría, pero no se rompería del todo.
El efecto añadido del vidrio de seguridad laminado es un aislamiento acústico casi doble en comparación con el vidrio estándar. Y justo esto es también lo que se buscaba. “La forma en E del complejo de edificios tiene como consecuencia que muchas viviendas se hallen unas frente a las otras y relativamente cerca entre sí”, aclara el arquitecto Riccardo Dossi. “Esto en verano, por supuesto, puede resultar ruidoso: un vecino habla por teléfono en el balcón, el otro organiza una barbacoa en su jardín... por eso es importante tener el aislamiento acústico adecuado”.
“En Finstral hay dos cosas que siempre van de la mano: la funcionalidad y la estética. Y hemos desarrollando nuestra gama de productos de forma consecuente bajo el principio de la modularidad. Es decir que casi todo combina con todo”, explica Florian Oberrauch. “Por eso, para este proyecto también pudimos suministrar exactamente los productos y las combinaciones de productos que se necesitaban”. En este caso se utilizaron ventanas y puertas balconeras con la forma de marco Nova-line. Sus características especiales son perfiles extremadamente estrechos y un aspecto todo vidrio recubriendo el marco. Como complemento, el angular diseño del marco Step-line aporta a las puertas balconeras una apariencia escalonada y a la vez delgada. Por último, las grandes superficies de vidrio de los llamativos frontales acristalados dejan entrar toda la luz posible, un efecto que en el caso de los comercios invita a entrar. Algunos de los elementos inferiores son de vidrio y otros tienen un panel liso, que se adapta al color del perfil, oscuro en el exterior y claro en el interior.
Materiales de las superficies de los marcos
Las superficies de los marcos de las ventanas y puertas balconeras y correderas son de aluminio oscuro por el exterior y de PVC claro en el interior. “No suena muy espectacular”, reconoce el arquitecto Dossi. “Pero fue una decisión muy consciente y la acertada”. Estéticamente, los perfiles de aluminio oscuro en el lado exterior aportan a las edificaciones un aspecto moderno y elegante, mientras que las superficies de PVC blanco llenan de claridad los espacios interiores. Funcionalmente, el aluminio en el exterior permanece resistente a las inclemencias, es muy robusto y además no se deforma con el calor, mientras que los perfiles de PVC en el interior son fáciles de limpiar y duraderos, aparte de ser agradables al tacto. En definitiva, las ventanas contribuyen de forma decisiva a que las cinco edificaciones de la “Corte Scolastica” resulten muy elegantes y muy abiertas.
Protección completa
“A quien no está abierto el complejo es a visitantes indeseados”, dice Simone Gattabuia, que ha dirigido el proyecto por parte de Finstral. “Por eso las ventanas utilizadas protegen contra insectos, así como contra ladrones. Además de contra un exceso de sol y de ruido”.
Las ventanas cuentan por ello con mosquiteras enrollables verticalmente y las puertas balconeras y correderas, con mosquiteras en “plissee” deslizantes lateralmente. Y por ello se utilizó el doble vidrio aislante con protección solar Mediterran 2 que, con un valor g de 0,45 y un valor LT de 0,73, deja pasar mucha luz a los espacios, pero impide que se sobrecalienten. Y por ello se usaron además dos tipos de vidrio de seguridad: el vidrio de seguridad simple templado y el vidrio laminado de seguridad Multiprotect, que está compuesto por dos vidrios adheridos entre sí mediante una lámina muy resistente al desgarro. Ambas variantes reducen el riesgo de lesiones. Si el vidrio se rompe, el Bodysafe solo se fractura en muchos fragmentos pequeños y romos, en vez de afilados. En el caso de Multiprotect, los fragmentos incluso se quedan pegados a la lámina. En caso de un intento de robo rompiendo el vidrio con un martillo, el vidrio se fragmentaría, pero no se rompería del todo.
El efecto añadido del vidrio de seguridad laminado es un aislamiento acústico casi doble en comparación con el vidrio estándar. Y justo esto es también lo que se buscaba. “La forma en E del complejo de edificios tiene como consecuencia que muchas viviendas se hallen unas frente a las otras y relativamente cerca entre sí”, aclara el arquitecto Riccardo Dossi. “Esto en verano, por supuesto, puede resultar ruidoso: un vecino habla por teléfono en el balcón, el otro organiza una barbacoa en su jardín... por eso es importante tener el aislamiento acústico adecuado”.
La planta en forma de “E” de la antigua hacienda se conservó.
Disposición armoniosa de las ventanas en la parte exterior.
El diseño elegante de las ventanas se integra en las viviendas modernas.
Una parte de la forma en “E” del complejo de edificios.
Grandes superficies acristaladas garantizan la máxima entrada de luz.
¡La clave es el montaje!
“Por muy bonita que sea una ventana y por muy elevada que sea su calidad, de nada sirve si no se monta bien”, añade Dossi. “En este sentido, Finstral también fue la elección correcta. Ya conocía la calidad certificada de su montaje. Y aquí la hemos vuelto a constatar”.
Simone Gattabuia se alegra de esta valoración por parte del arquitecto: “Cuando el montaje no es perfecto, todo trabajo previo en el desarrollo y la producción de los elementos es cuasi en vano”. Por este motivo, desde hace años, Finstral somete muchas conexiones de obra al escrutinio del renombrado Institut für Fenstertechnik de Rosenheim; y todos sus montadores, así como las 130 empresas de montaje asociadas, han sido certificados por el instituto.
“Esto permitió a nuestros profesionales del montaje afrontar sin problemas dos desafíos que surgieron en la Corte Scolastica”, informa el jefe de proyectos de Finstral.
En primer lugar, como el montaje tenía que ser enrasado por el interior, durante la fase de construcción se colocaron premarcos de montaje especiales. Y es que los marcos no debían colocarse directamente sobre los ladrillos, sino sobre el aislamiento interior de la placa de cartón yeso. Por eso se tuvieron que colocar soportes adicionales para sujetar el premarco. Por último, las ventanas de alta calidad se montaron una vez acabados los trabajos que ensucian, como se hace siempre en el montaje con premarco, evitando la suciedad y los daños tan habituales en las obras de construcción. “El montaje duró un poco más de lo habitual debido al soporte especial del premarco. Pero, como nos gusta utilizar el montaje con premarco a menudo, lo dominamos muy bien y seguimos siendo notablemente más rápidos de lo que se es con otros métodos de montaje”, aclara el jefe de proyectos Gattabuia. “Entre otras cosas, porque planificamos el proceso de forma muy sistemática”. Los montadores trabajaron sucesivamente yendo de una parte a otra del complejo. Una vez terminaban de montar los premarcos en un bloque, los demás oficios podían continuar con su trabajo. Los profesionales de las ventanas pasaban al siguiente bloque. A la hora de colocar las ventanas se empezó por el principio a lo largo de toda la “E”. De este modo se evitaron las interrupciones en todo momento.
¿El segundo desafío? El tamaño y el peso de los elementos. Para llevarlos a las plantas superiores, hizo falta una grúa especial, que elevó las ventanas y las puertas correderas mediante ventosas al lugar correspondiente, donde se montaron. El uso de esta grúa especial también se incluyó en la planificación para que no hubieran sorpresas desagradables.
85 ventanas, 89 puertas balconeras, 30 puertas correderas elevadoras y 11 puertas de entrada. Una media de cinco montadores, montaron en total 215 elementos en “Corte Scolastica” en un plazo de 18 meses. “El montaje transcurrió sin problemas de principio a fin”, corrobora satisfecho Dossi. “Tal y como se desea de un socio”.
A quien no sepa que en este lugar antes había una hacienda abandonada, ni se le pasará por la cabeza. Florian Oberrauch, Simone Gattabuia y Riccardo Dossi han terminado su recorrido por los cinco edificios del complejo. La estética, la protección, el confort, todo a la última, gracias también a las ventanas y puertas correderas de Finstral. “Bien está lo que bien acaba”, se alegra Florian Oberrauch al final de la visita. “¡Una nueva `E´ bonita desde todo punto de vista!”
“Por muy bonita que sea una ventana y por muy elevada que sea su calidad, de nada sirve si no se monta bien”, añade Dossi. “En este sentido, Finstral también fue la elección correcta. Ya conocía la calidad certificada de su montaje. Y aquí la hemos vuelto a constatar”.
Simone Gattabuia se alegra de esta valoración por parte del arquitecto: “Cuando el montaje no es perfecto, todo trabajo previo en el desarrollo y la producción de los elementos es cuasi en vano”. Por este motivo, desde hace años, Finstral somete muchas conexiones de obra al escrutinio del renombrado Institut für Fenstertechnik de Rosenheim; y todos sus montadores, así como las 130 empresas de montaje asociadas, han sido certificados por el instituto.
“Esto permitió a nuestros profesionales del montaje afrontar sin problemas dos desafíos que surgieron en la Corte Scolastica”, informa el jefe de proyectos de Finstral.
En primer lugar, como el montaje tenía que ser enrasado por el interior, durante la fase de construcción se colocaron premarcos de montaje especiales. Y es que los marcos no debían colocarse directamente sobre los ladrillos, sino sobre el aislamiento interior de la placa de cartón yeso. Por eso se tuvieron que colocar soportes adicionales para sujetar el premarco. Por último, las ventanas de alta calidad se montaron una vez acabados los trabajos que ensucian, como se hace siempre en el montaje con premarco, evitando la suciedad y los daños tan habituales en las obras de construcción. “El montaje duró un poco más de lo habitual debido al soporte especial del premarco. Pero, como nos gusta utilizar el montaje con premarco a menudo, lo dominamos muy bien y seguimos siendo notablemente más rápidos de lo que se es con otros métodos de montaje”, aclara el jefe de proyectos Gattabuia. “Entre otras cosas, porque planificamos el proceso de forma muy sistemática”. Los montadores trabajaron sucesivamente yendo de una parte a otra del complejo. Una vez terminaban de montar los premarcos en un bloque, los demás oficios podían continuar con su trabajo. Los profesionales de las ventanas pasaban al siguiente bloque. A la hora de colocar las ventanas se empezó por el principio a lo largo de toda la “E”. De este modo se evitaron las interrupciones en todo momento.
¿El segundo desafío? El tamaño y el peso de los elementos. Para llevarlos a las plantas superiores, hizo falta una grúa especial, que elevó las ventanas y las puertas correderas mediante ventosas al lugar correspondiente, donde se montaron. El uso de esta grúa especial también se incluyó en la planificación para que no hubieran sorpresas desagradables.
85 ventanas, 89 puertas balconeras, 30 puertas correderas elevadoras y 11 puertas de entrada. Una media de cinco montadores, montaron en total 215 elementos en “Corte Scolastica” en un plazo de 18 meses. “El montaje transcurrió sin problemas de principio a fin”, corrobora satisfecho Dossi. “Tal y como se desea de un socio”.
A quien no sepa que en este lugar antes había una hacienda abandonada, ni se le pasará por la cabeza. Florian Oberrauch, Simone Gattabuia y Riccardo Dossi han terminado su recorrido por los cinco edificios del complejo. La estética, la protección, el confort, todo a la última, gracias también a las ventanas y puertas correderas de Finstral. “Bien está lo que bien acaba”, se alegra Florian Oberrauch al final de la visita. “¡Una nueva `E´ bonita desde todo punto de vista!”
Las ventanas y puertas de entrada aportan seguridad.
Marcos estrechos, mucho vidrio, mucha luz.
Mosquitera flexible enrollable en vertical para una buena protección contra los insectos.
Espacios claros gracias a perfiles estrechos de PVC blanco.
Los elementos inferiores aportan todavía más luz.
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Renovación de ventanas en el Policlínico San Pietro de Bérgamo.
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