Joachim Oberrauch dirige Finstral AG y es consciente de que la empresa no hubiera sido lo que es hoy si no hubiera dado importancia a la sostenibilidad desde el principio.
Señor Oberrauch, ¿qué significa para usted la sostenibilidad?
Ser sostenible significa crear algo que dure mucho durante mucho tiempo y que al final aporte un beneficio. O, dicho de otro modo, utilizar los recursos de forma cada vez más eficiente. Para mí la sostenibilidad no es un objetivo, sino una actitud; Finstral es sostenible por convicción.
¿En qué medida Finstral actúa de forma sostenible?
Actuamos conscientemente en todos los ámbitos. Nuestros productos se utilizan durante 30/40 años o incluso más. Por lo tanto, la función y el diseño deben durar el mayor tiempo posible y, al mismo tiempo, el proceso de fabricación debe requerir la menor cantidad de energía posible y con un uso razonable. A diferencia de muchas otras empresas del sector, realizamos nosotros mismos casi todos los componentes. Así todo está en nuestras manos y podemos hacer las cosas bien desde el principio. Ya desde el desarrollo de los productos pensamos detenidamente en qué materiales utilizar y cuál es la mejor forma de combinarlos.
Finstral ofrece una extraordinaria gamas de productos. ¿Cómo se consigue garantizar la sostenibilidad de cada variante de producto?
Gracias a la estructura modular de nuestros productos. La gama Finstral hace posible casi cualquier combinación. Esto supone un gran ahorro en términos de logística y producción y, por consiguiente, de energía y recursos. Otro aspecto importante son nuestras soluciones innovadoras en el montaje. Los trabajos de montaje en obra suelen seguir siendo tan complejos como hace 30 años. Mediante el uso de premarcos para las obras nuevas o el montaje con marco de renovación para la sustitución, ofrecemos alternativas eficaces y mucho más sostenibles.
¿Cómo promueve Finstral la sostenibilidad?
Optimizando continuamente todos nuestros procesos. En la producción, por ejemplo, adoptamos el sistema de gestión de la energía según la norma ISO 50001 y el sistema de gestión medioambiental según la norma ISO 14001 para comprobar los procedimientos, aumentar nuestra eficiencia energética e identificar sistemáticamente los puntos débiles. Cada año realizamos inversiones para mejorar nuestros sistemas y procesos, desde la moderna maquinaria de bajo consumo hasta el uso de lámparas LED y paneles fotovoltaicos en las cubiertas de nuestras naves. En nuestras fábricas de Italia, utilizamos la energía procedente de fuentes de energía 100% renovables, y hasta un 60% en Alemania. Realizamos componentes de PVC completamente sin desperdicios: recogemos todos los descartes, los separamos y los reutilizamos para la extrusión de nuevos perfiles. En mayo de 2021, hemos inaugurado nuestra nueva planta de reciclaje en Kurtatsch (Italia). La reducción de los embalajes, incluidos los de nuestros proveedores, es también una de nuestras prioridades actuales.
Finstral existe desde 1969. ¿Qué significaba entonces la sostenibilidad?
Para entenderlo bien, tenemos que hablar de la madera como material de construcción. La madera es muy bonita y transmite una sensación inmediata de bienestar, pero tiene un inconveniente: se deteriora con el tiempo. Y es precisamente de esta cuestión como nació Finstral. En aquella época, mi padre era carpintero y buscaba una alternativa más fácil de limpiar y más duradera. Encontró la respuesta adecuada en el PVC, un material con colores estables y una resistencia extrema a la intemperie. Le convenció hasta tal punto que le empujó hacia emprender un nuevo camino. Echando la vista atrás, se puede decir que desde los inicios, Finstral ya se planteaba un principio de sostenibilidad.